Una persona acude a una fiesta, poco después de que la hayan despedido por pasarse su jornada laboral dibujando estrellas. En esa fiesta, donde descubre el amor y más adelante la traición, ve en el horizonte esa misma estrella con la que soñaba y que no podía parar de dibujar. Entonces, decide ir en busca de ese punto luminoso, y para ello, atravesar un bosque que, tal y como nos explica Alice Wonder durante la entrevista, no es sino “una representación de su alma”.
Esta es la historia que estructura Soulost, el nuevo disco de la cantante madrileña de 27 años y que, nos dice, terminó hace tan solo dos días. Alice Wonder es hoy un icono del indie en España por discos como Que Se Joda Todo Lo Demás, y por actuaciones en directo tan recordadas como su versión al piano de Lucha de gigantes en el homenaje a las víctimas del coronavirus (se hicieron virales las imágenes de la reina Letizia llorando durante la canción) o su posterior participación en el Benidorm Fest.
Cuatro años después de su último disco, Alice Wonder regresa con un nuevo álbum mucho más ecléctico y experimental que sus anteriores lanzamientos. Un trabajo que, nos explica, “nace de la necesidad de entender un poco la vida” a raíz de una “pérdida de fe personal”, y que a través de todas sus estéticas y sonidos nos cuenta el viaje de un héroe en busca de una estrella, o lo que es lo mismo, un despertar. “No encuentras la estrella, porque te das cuenta de que la estrella eres tú”.