A lo largo de los años, Sony introdujo mejoras tecnológicas y nuevos diseños para adaptarse a los cambios de la industria y de los gustos del público. Modelos posteriores incluyeron reproductores de CD y, eventualmente, adaptaciones digitales, que mantuvieron el legado del Walkman como pionero en el entretenimiento portátil.
Gracias al invento, la experiencia musical se volvió profundamente personal y accesible, creando un mercado de dispositivos portátiles que generó millones en ganancias. Este innovador aparato fue mucho más que un reproductor de cassettes; fue un símbolo de libertad y una herramienta que permitió a millones de personas disfrutar de la música a su manera y en cualquier lugar.